
La admisión es clara: hay un retraso respecto a la competición.
George Russell no da la vuelta a los problemas del Mercedes, que se encontró con un día muy difícil en Bahrein, donde se están celebrando los tests de pretemporada de Fórmula 1. El piloto británico tuvo que parar por un problema hidráulico cuando había marcado el decimotercer mejor tiempo. Lo preocupante, sin embargo, es el retraso de dos segundos de Red Bull.
“Comparado con hace un año, las cosas están mucho mejor. Estábamos perdidos, por las características del monoplaza y también por el propoising. Ahora no está tan mal, aunque todavía tenemos que mejorar mucho. Pero siendo realistas, será difícil estar al nivel de Red Bull en el Gran Premio de Bahrein”, explicó Russell en rueda de prensa.
“Digamos que en general estamos donde pensábamos. Los próximos días serán un poco difíciles, pero sabemos que la fuerza de Mercedes reside en su capacidad para desarrollar el coche a lo largo de los meses. Así que estamos convencidos de que mejoraremos”, aseguró Russell.